Published
Julio 07, 2021
Gracias a la tecnología y la constante innovación, en el mercado podemos encontrar una gran variedad de opciones de videovigilancia. Entre las opciones más populares y que comúnmente son elegidas se encuentra la disyuntiva entre una cámara IP o una cámara CCTV. Pero, ¿Cuáles son las diferencias así como las ventajas y desventajas de cada una? Te lo explicamos a continuación para que tomes la mejor decisión.
Efecto disuasor para los ladrones, es decir, desalentar a que cometan un robo antes de que lo intenten; porque tienen la probabilidad de que los reconozcan y los capturen, por la evidencia de las grabaciones.
Fácil instalación y mantenimiento.
Mayor número de opciones y cualidades por menor precio.
Se pueden conectar a cualquier ordenador o dispositivo desde cualquier sitio mientras se tenga acceso a internet, para poder ver y manipular la cámara.
Si no dispones de mucho presupuesto o los requisitos de vigilancia no son tan específicos, una cámara IP puede brindarte seguridad y tranquilidad por poca inversión.
Seguridad anti - inhibición, la señal del sistema CCTV no se puede inhibir a comparación con las que son de señal por internet.
Mayor seguridad por sistema centralizado, es decir, una solución mas profesional, porque, ante cualquier alerta, se verifica la amenaza y si es requerido se envía algún agente de seguridad y aviso policiaco.
Mayor fiabilidad de imagen, esto es porque la cámara siempre estará conectada al monitor, por lo que no perderá detalle por saturación de la red.
Seguridad anti – sabotaje, si alguien quiere hacer algún tipo de sabotaje en el cableado, automáticamente se envía una alarma a la empresa de seguridad.
Cualquiera de los dos tipos de cámaras, tiene algunos inconvenientes, como el hecho que dependen de la electricidad y de que deben respetar la ley de protección de datos.
Depende totalmente del servicio a internet, porque si falla la red, no hay acceso a estas, o si la señal es baja, se pierde visión de lo que ocurra en el video.
Susceptible a sabotaje, porque tienen la probabilidad de inhibirlas por medio de la frecuencia WIFI o móvil.
Instalar un sistema CCTV suele ser mucho más caro y complejo a comparación de una cámara IP.
Una mala instalación, puede provocar sabotaje, y sin una empresa de seguridad, es muy vulnerable.
De seguro te estarás preguntando que es más seguro para instalar, pues, la mejor opción es una cámara híbrida. Son la mejor opción, porque además de contar con el sistema CCTV, puedes acceder a las cámaras a través de internet, y así estar atentos sin la necesidad de estar en un solo lugar. Estas recogen lo mejor de los dos tipos de cámaras, sin renunciar a la comodidad y fiabilidad.
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